Ir al contenido principal

Utopías del BID: alianzas para la ciencia y la tecnología

Por Jorge Zavaleta Alegre, Lima

Los agricultores de América Latina y el Caribe, según un alarmista estudio del BID, padecerán grandes pérdidas de ingresos si se pone en vigor una prohibición total de la deforestación, y será necesario emprender acciones compensatorios para aliviar la pobreza en zonas rurales, que no siempre serían distribuidas con equidad.

Se trata de una reflexión utópica, improbable e imposible, dejando para un segundo lugar reflexiones sobre el desarrollo de la Amazonía, tal como conocían desde hace tiempo los pueblos nativos, que radican en el reconocimiento de la biodiversidad de los ecosistemas, de la flora, la fauna y del germoplasma nativo, para ponerla al servicio de la humanidad, dentro de los conceptos modernos del biocomercio y el comercio justo, que propicia la OMC. El Perú está entre los 10 países magadiversos.

En estos meses preelectorales para elegir un nuevo gobierno (2011-2016), los candidatos presidenciales y al Parlamento, con algunos matices, consideran que el desarrollo del mercado y el crecimiento económico, requieren de políticas nacionales para las ciencias y la innovación tecnológica, a través de una alianza entre Estado, sector privado y Universidad, que apoye aquellos proyectos dirigidos a generar valor agregado para los principales productos de nuestra biodiversidad.

Que ilustrativas son las ferias tecnológicas que nos ofrecen algunas facultades de las universidades nacionales Ingeniería, la Molina o la Católica, o las asociaciones promotoras de festivales gastronómicos o el desarrollo de los complejos textileros de Gamarra y Puno. Nos damos cuenta de la conveniencia de tener centros tecnológicos regionales articulados a las actividades empresariales, y así mejorar la calidad de la producción y competir en mercados más exigentes.

Semanas atrás, la Universidad Nacional de Ingeniería presentó 35 proyectos para mejorar la calidad de vida y la inclusión social. Willax TV, concedió especial atención a la denominada “Oferta Científica Tecnológica para el Desarrollo Sostenible”.

Uno de los proyectos más visitados fue el “Buque TIC-UNI”, que recorrerá los ríos amazónicos, llevando capacitación tecnológica y telemedicina a poblados ribereños. Otro proyecto, el Nanosatélite Chasqui I, para obtener información meteorológica, identificar desbordes y estados de los ríos, detección de tormentas, posibles inundaciones y condiciones de humedad de los suelos, entre otras aplicaciones.

Igualmente atractivo para el público fueron las Casas de Confort Térmico, para combatir el frio que sufren los habitantes que viven entre los 3000 y 5000 m.s.n.m, aprovechando la energía solar y techos de pajilla de arroz.

Cualquier propuesta de esta naturaleza es solo un sueño si no se atiende el soporte financiero. Actualmente. la asignación a las universidades nacionales para el rubro de investigación es simbólico. En los diferentes planes de gobierno figuran asignar un fondo no menos del 3 al 4% del PBI para promover la interacción en la innovación tecnológica entre Universidad, Empresa y Estado. Algo similar se propuso hace 25 años, en Los Pioneros, un conjunto de entrevistas a 30 científicos y empresarios peruanos, publicado por la Fundación Ebert.
















ARCHIVOS

Mostrar más


OTRA INFORMACIÓN ES POSIBLE

Información internacional, derechos humanos, cultura, minorías, mujer, infancia, ecología, ciencia y comunicación

El Mercurio Digital (elmercuriodigital.es) se edita bajo licencia de Creative Commons
©Desde 2002 en internet
Otra información es posible




AI FREE: DIARIO LIBRE DE INTELIGENCIA ARTIFICIAL