Gustavo Carrasquel | ANCA 24.-Investigaciones muestran que los bosques del norte en tres provincias de las praderas del oeste de Canadá se están secando producto de la sequía causada por el cambio climático.
Un documento publicado por investigadores de la Universidad de Montreal, indica que los bosques de Alberta, Saskatchewan y Manitoba emiten más gases de efecto invernadero del que son capaces de absorber.
El hallazgo demuestra que el calentamiento global afecta las condiciones de crecimiento de los árboles en el norte.
Los investigadores examinaron árboles en 96 lugares diferentes a través de Canadá. Ellos fueron escogidos cuidadosamente entre 20.000 candidatos, pero tomando en cuenta que estos no estuvieran alterados por incendios, insectos o la industria forestal.
Con los datos obtenidos, los investigadores calcularon el “cambio de biomasa” – el crecimiento total combinado de los árboles – por cada año desde 1963 hasta 2008.
Determinaron que tanto en el Este y el Oeste, los árboles se mueren antes. Sin embargo, en los bosques del este, los árboles sobrevivientes fueron creciendo más rápido, lo que igualó el efecto del aumento de la mortalidad.
En Occidente, los árboles crecían más lentamente y mueren más jóvenes. Los científicos concluyeron que en el oeste de los bosques boreales se produjeron dos toneladas de madera por hectárea, menos en el 2008, en comparación con la década de 1970.
La tendencia parece estar ganando velocidad. Después del 2000, hay una sacudida más grande. El análisis estadístico vincula el descenso a la sequía. El oeste de Canadá ha sufrido tanto reducción de las precipitaciones como aumento de las temperaturas a un ritmo más rápido que al este.
Los hallazgos son malas noticias para desarrollo de los bosques desfavoreciendo la succión de carbono en la atmósfera.
Los datos sugieren que los bosques orientales emiten más dióxido de carbono del que absorben, pero que ya no es el caso en el Oeste.
Los bosques boreales se han convertido en una fuente neta de carbono, más incrementado desde 2003, a pesar de que ha mejorado un poco desde en los recientes muestreos.
El estudio cuestiona además la creencia que el calentamiento global promoverá el crecimiento de los árboles y los bosques en el norte del hemisferio occidental.
A menos que las temperaturas más cálidas están acompañados por mayores precipitaciones – cosa que no ha sucedido – la industria forestal puede tener que volver a examinar sus proyecciones.
Sí, el calentamiento global puede ser beneficioso para el arbusto y la tundra, el déficit de agua en el verano es un gran problema, especialmente en Alberta, Saskatchewan y Manitoba.”
Eventualmente podría generar preocupación la disminución de los bosques, pues ya no son capaces de soportar las asignaciones anuales de la cosecha, afectando seriamente la industria forestal.
“Tal vez sus metas para el año no son sostenibles. Es necesario tomar en cuenta estos efectos del cambio climático”, manifestaron finalmente en su informe.
Un documento publicado por investigadores de la Universidad de Montreal, indica que los bosques de Alberta, Saskatchewan y Manitoba emiten más gases de efecto invernadero del que son capaces de absorber.
El hallazgo demuestra que el calentamiento global afecta las condiciones de crecimiento de los árboles en el norte.
Los investigadores examinaron árboles en 96 lugares diferentes a través de Canadá. Ellos fueron escogidos cuidadosamente entre 20.000 candidatos, pero tomando en cuenta que estos no estuvieran alterados por incendios, insectos o la industria forestal.
Con los datos obtenidos, los investigadores calcularon el “cambio de biomasa” – el crecimiento total combinado de los árboles – por cada año desde 1963 hasta 2008.
Determinaron que tanto en el Este y el Oeste, los árboles se mueren antes. Sin embargo, en los bosques del este, los árboles sobrevivientes fueron creciendo más rápido, lo que igualó el efecto del aumento de la mortalidad.
En Occidente, los árboles crecían más lentamente y mueren más jóvenes. Los científicos concluyeron que en el oeste de los bosques boreales se produjeron dos toneladas de madera por hectárea, menos en el 2008, en comparación con la década de 1970.
La tendencia parece estar ganando velocidad. Después del 2000, hay una sacudida más grande. El análisis estadístico vincula el descenso a la sequía. El oeste de Canadá ha sufrido tanto reducción de las precipitaciones como aumento de las temperaturas a un ritmo más rápido que al este.
Los hallazgos son malas noticias para desarrollo de los bosques desfavoreciendo la succión de carbono en la atmósfera.
Los datos sugieren que los bosques orientales emiten más dióxido de carbono del que absorben, pero que ya no es el caso en el Oeste.
Los bosques boreales se han convertido en una fuente neta de carbono, más incrementado desde 2003, a pesar de que ha mejorado un poco desde en los recientes muestreos.
El estudio cuestiona además la creencia que el calentamiento global promoverá el crecimiento de los árboles y los bosques en el norte del hemisferio occidental.
A menos que las temperaturas más cálidas están acompañados por mayores precipitaciones – cosa que no ha sucedido – la industria forestal puede tener que volver a examinar sus proyecciones.
Sí, el calentamiento global puede ser beneficioso para el arbusto y la tundra, el déficit de agua en el verano es un gran problema, especialmente en Alberta, Saskatchewan y Manitoba.”
Eventualmente podría generar preocupación la disminución de los bosques, pues ya no son capaces de soportar las asignaciones anuales de la cosecha, afectando seriamente la industria forestal.
“Tal vez sus metas para el año no son sostenibles. Es necesario tomar en cuenta estos efectos del cambio climático”, manifestaron finalmente en su informe.