AGENCIAS.- Ocho países de Asia y África, considerados claves en el tráfico ilegal de marfil, se comprometieron a tomar una serie de medidas para detener este delito internacional que amenaza la supervivencia de los elefantes.
El organismo que gestiona la Convención Internacional de Especies Amenazadas de Flora y Fauna (Cites), cuya sede principal está en Ginebra, informó este viernes que China, Kenia, Malasia, Filipinas, Tailandia, Uganda, Tanzania y Vietnam han presentado planes urgentes para detener ese tráfico y proteger a los elefantes, informa la agencia de noticias pública española EFE.
Las medidas deben comenzar a aplicarse en julio de 2014 en estas naciones, identificadas como de origen, tránsito o destino del marfil ilegal.
Del mismo modo, CITES indicó que los Estados que deben adoptar acciones prioritarias para contener el comercio ilegal de marfil son Camerún, Congo-Brazaville, República Democrática del Congo, Egipto, Gabón, Mozambique y Nigeria. Se les pidió que tomaran resoluciones este mismo año, pero no han expuesto sus programas para ello.
Hace más de una semana, el ente denunció una masacre de elefantes en una zona declarada Patrimonio Mundial en el suroeste de la República Centroafricana, región colindante con Camerún y la República Democrática del Congo y que está bajo su supervisión.
Los presuntos responsables fueron grupos armados que buscaban financiar sus actividades a través de la venta de los colmillos de elefantes.
En febrero pasado, la Sociedad de Conservación de la Fauna (WCS) denunció que desde 2004, más de 11.000 elefantes murieron en la República Gabonesa a manos de los traficantes de marfil, altamente demandados y con precios elevados en los mercados.
Un empleado de aduanas muestra cuernos de marfil de elefante que fueron confiscados en el aeropuerto de Bangkok, Tailandia, en diciembre de 2012. EFE/Narong Sangnak