“Somos v铆ctimas de la ocupaci贸n, pero tambi茅n por ser mujeres”
elmercuriodigital.es- Andrea Momoitio/Pikara Magazine.- La salud de Aminatou Haidar est谩 resentida. Las huelgas de hambre han da帽ado su est贸mago y los cuatro a帽os en una prisi贸n marroqu铆 han causado estragos en su espalda. Por eso, no acudi贸 al III Congreso Internacional de Apoyo a la Resistencia de Mujeres Saharauis’. Este acontecimiento excepcional e hist贸rico no pod铆a darse por finalizado sin escucharla, por lo que recibi贸 en su casa a todas las representantes de los colectivos internacionales congregados en El Aai煤n.La situaci贸n pol铆tica del Sahara Occidental requiere de alianzas y muchos esfuerzos para ser resuelta, pero Haidar mostr贸 su preocupaci贸n ante la situaci贸n espec铆fica de las mujeres: “No tenemos que esperar a que llegue la independencia para lograr nuestros derechos. Tenemos que trabajar por ello ya, ahora”. Estas declaraciones fueron recibidas con gran optimismo por muchas de las representantes de colectivos feministas, que escuchaban con atenci贸n a una Haidar que hab铆a convertido el sal贸n de su casa un hemiciclo.
Las mujeres saharauis est谩n en primera l铆nea pol铆tica trabajando por el derecho a la autodeterminaci贸n de su pueblo, pero –de la misma manera que ha ocurrido en otros procesos revolucionarios– corren el riesgo de ser desplazadas de la vida p煤blica al lograr la independencia. Pas贸 en la revoluci贸n francesa y debatieron mucho sobre ello las marxistas. “En el Sahara Occidental tambi茅n hay discriminaci贸n de g茅nero, peque帽a o grande, pero existe. Las mujeres saharauis no somos de otro planeta. Si se compara nuestra situaci贸n con la de otras mujeres 谩rabes o musulmanas es cierto que estamos m谩s avanzadas, pero esto no es una victoria”.
Aminatou Haidar recibi贸, en su vivienda de El Aai煤n, a activistas extranjeros.- Andrea Momoitio |
El trabajo de los colectivos internacionales con las mujeres saharauis se complica debido al bloqueo marroqu铆, en los territorios ocupados. La barrera idiom谩tica, no tan marcada en los campamentos, dificulta el trabajo en las zonas colonizadas. Haidar, sin embargo, se mostr贸 contraria a hablar de las saharauis de los campamentos: “En las zonas ocupadas, muchas familias no dejan a sus hijas continuar sus estudios. Puedo entender que no las dejen despu茅s del bachillerato porque aqu铆 no hay universidad y temen la represi贸n marroqu铆 si salen a estudiar fuera, pero deber铆an dejarlas, al menos, estudiar hasta bachillerato”. La educaci贸n es un elemento indispensable para el empoderamiento de las mujeres: “Necesitamos m谩s formaci贸n general, pero tambi茅n espec铆fica en cuestiones de g茅nero”.
Se muestra favorable a compartir experiencias con otras mujeres y a trabajar para educar a las m谩s j贸venes. “Somos v铆ctimas de la ocupaci贸n, pero olvidamos que tambi茅n somos v铆ctimas por ser mujeres. Sufrimos una represi贸n espec铆fica y es importante que trabajemos ahora para evitar que, en el futuro, les pase lo mismo a nuestras hijas. Si no lo hacemos ahora, no lo haremos nunca”, asegur贸 categ贸rica. “Tenemos que trabajar para que ma帽ana, nosotras, que hemos estado en las c谩rceles, no sigamos siendo v铆ctimas por ser mujeres”. La independencia del pueblo saharaui no puede posponer, ni relegar a un segundo plano, la lucha por la independencia de las mujeres. “Vuestra visita es un apoyo moral, pero sobre todo es un acto pol铆tico, que espero sirva para llevar a acabo acciones concretas a favor del Sahara Occidental”, declar贸 emocionada.